Revitalizar el museo no significa necesariamente invertir en nueva museografía.
Los museos ricos renuevan su museografía cada vez que se enfrentan a cambios importantes; en un museo modesto esto no es posible. Es posible que solo nos podamos permitir cambiar los muebles de sitio y añadir algún «nuevo toque». Lo hacemos como cuando nos planteamos renovar la decoración de nuestra casa: cada vez que cambiamos los muebles de sitio y pintamos algunas paredes, parece que hemos hecho una gran renovación – jugar con gráficas y arte en las paredes también ayuda -. En el museo local puede ocurrir algo similar. Reorganizar una colección es una forma de renovar y actualizar todo un museo; reagrupar obras de arte de una forma diferente es una manera de promover lecturas distintas del propio arte; se trata de ofrecer a los visitantes que ya conocen el museo una nueva observación desde una visión diferente de los mismos objetos.
Os proponemos un ejemplo más detallado. Un objeto puede transmitir muchos mensajes diferentes; así, por ejemplo, una moneda romana de la época del emperador Augusto puede ser usada para mostrar el rostro del hombre, ya que su perfil está grabado en el anverso de la misma; nos está indicando que los artesanos romanos conocían bien el arte del retrato; y, sin embargo, fijándonos en su inscripción: «DIVUS AUGUSTUS PATER», nos daremos cuenta de que el emperador era tratado al nivel de una divinidad (DIVUS). La moneda nos habla de creencias religiosas romanas que llegaba a divinizar a determinados seres humanos. Al mismo tiempo, en el reverso de la moneda de Augusto, con la figura de la Victoria alada aparece la inscripción «SC» (Senatus Consulto), es decir, «con la aprobación del senado», lo cual nos muestra el mecanismo político que decidía cuándo, quién y cómo se acuñaban las monedas; finalmente analizada desde un punto de vista técnico, de estampación metálica y de aleación de metal, nos proporciona otro nivel de información, además de la pura y simple información económica. Cualquier objeto del pasado, al igual que el ejemplo de la moneda, puede tener muchas lecturas diferentes y complementarias, todo depende de cómo se ordene y contextualice el objeto con relación a los demás. Hay mucho material de conocimiento en una sola moneda, mostrémoslo de una manera diferente al visitante.
Si los objetos del museo se reordenan con cierta frecuencia, se dará la sensación de estar proponiendo cambios continuos al visitante que ya nos conoce. Para ello, se pueden cambiar los textos, colocar gráficas bonitas (una reproducción gráfica del rostro de Augusto en formato gigante como fondo a la moneda), etcétera. No hay que tener miedo, es mejor renovar el discurso, aun cuando sea solo con el uso de gráficas convencionales hechas con el ordenador del museo, que seguir teniendo textos envejecidos sobre objetos nobles. El museo se transformará de esta forma en un organismo vivo, que irá cambiando de forma y cobrará vida nueva en cada cambio. De lo contrario el museo será un lugar consagrado como tumba de la cultura.
Diseño señaléctica: The Tank Way Finding
IDEAS QUE CUESTAN POCO DINERO:
En todas las ciudades existe un colectivo de artistas jóvenes que están deseando darse a conocer. Si se contacta con ellos, dejando claro que la curaduría de las obras las hará el propio museo, seguro que podréis montar una exposición temporal muy interesante que revitalice el museo. Lo mismo se puede hacer con el trabajo de artesanos locales y artistas no convencionales, como los que crean determinado tipo de instalaciones e incluso happenings. También se puede contactar con las galerías para que se promocionen prestando obras al museo. Seguimos en la línea de promocionar el museo lo más que se pueda, conviviendo amistosamente con los medios de comunicación locales que suelen tener el área de cultura bastante vacía, con la necesidad de nutrirse de nuevos contenidos. Si se trabaja bien, se podrá definir una corriente de colaboración que beneficie a mucha gente, no solo al museo.
CURSOS EVE FEBRERO 2015:
· Curso de Museología Moderna
· Curso de Gestión de Marketing y Comunicación para Museos y sus Colecciones
· Curso de Diseño y Gestión de Identidad Visual para Museos y Centros de Visitantes
· Curso de Creación y Gestión de Espacios Comerciales
· Curso de Realidad Aumentada Aplicada a Museos y Patrimonio
Buenas tardes.Llevo alucinando tres semanas ,leyendo ,día tras día,todas y cada una de vuestras propuestas.Es increíble la imaginación y creatividad que nos mostrais cada día.Apostaría algo a que más de un museo ya se han puesto en contacto con vosotrso para que les asesoreis, y si no , es que aún no os han leído.
Tengo un grupo de amigos actores a los que les mostraba el otro día vuestras ideas acerca de cómo relacionar el museo con el público , a través de actuaciones callejeras.Les pareció genial , creo que andan barajando opciones.Enhorabuena.Un abrazo.Juan Carlos
Hola Juan Carlos, muchas gracias por dejarnos un comentario tan amable. Yo te diría que a veces pensamos que todos los museos rebosan imaginación y que no necesitan nuestros consejos en absoluto. Nos explicaremos. Después de 500 entradas o artículos han contactado con nosotros tres museos: uno para pedirnos tres fotos, otro para pedirnos que les ayudáramos a redactar un pliego de condiciones técnicas para un concurso y el último para pedirnos que le escribiéramos un post. Eso ha sido todo después de meses de trabajo diario excepto fines de semana. Por eso te decimos que en realidad no nos necesitan, parece obvio (es una ironía). En cualquier caso, estamos encantados porque de vez en cuando recibimos comentarios como el tuyo y eso nos ayuda a seguir adelante con entusiasmo y alegría. Escribir una entrada diaria no es fácil como te imaginarás, y a veces se hace muy cuesta arriba cuando observamos la desidia del abandono museístico generalizado. Si todos los museos fueran «visitables» no diríamos nada, no nos quejaríamos, no regalaríamos ideas, pero es que la mayoría son un horror, las cosas como son. No entendemos nada. Un fuerte abrazo Juan Carlos.
Reblogueó esto en Museu AfroDigital- Estação Portugal.