Museos: Recursos Materiales – Maquetas

Museos: Recursos Materiales – Maquetas

Cuando queremos exponer correctamente las características arquitectónicas, técnicas y artísticas de un determinado elemento patrimonial, las maquetas nos son muy útiles. Es una forma muy interesante de contextualizar e interactuar con estas réplicas a escala de elementos patrimoniales, y más aún si cuentan con estructuras manipulables, que se puedan tocar. Además, a los niños y niñas les encantan las maquetas, sobre todo si se las acompañamos de figuras humanas y animales, tipo belén, especialmente cuando se trata de maquetas de territorios, réplicas urbanas o edificios. Pero las maquetas también pueden reproducir cualquier clase de objeto, fenómenos meteorológicos, acciones químicas y/o físicas, estructuras moleculares, facsímiles, etcétera.

Las maquetas tienen la peculiaridad de que ayudan al visitante a tener una clara concepción espacial del contenido expuesto respondiendo a su tridimensionalidad. De la misma forma que ocurre con los recursos que venimos explicando en las entradas de la semana pasada, la maqueta debe estar diseñada para hacer comprender un determinado contenido espacial, además ha de ir acompañada de otro tipo de información complementaria que facilite y ayude a la transmisión correcta en la exposición del contenido.

Por lo tanto, si asociamos la maqueta tradicional a la tecnología y a la interactividad, el efecto que resulta de esta combinación es verdaderamente impactante y útil en su proyección didáctica. Con ello contribuímos a potenciar y reforzar el poder de atracción y motivación de este recurso, así como a la activación de emociones y sensaciones intelectuales en los visitantes. Las maquetas no son baratas, pero si nos las podemos permitir, sabemos con seguridad que van a tener una enorme repercusión positiva en el visitante.

En función de la escala que empleemos para la reproducción de la maqueta, podemos llegar a comprender e interpretar un amplio territorio o una pieza de pequeñas dimensiones, de manera contextualizada e interactiva, máxime si contamos con una escenografía que la acompañe o añadimos la capacidad de manipulación y articulación del recurso. El recurso aún se puede volver más impactante si lo combinamos con luz y sonido especiales. Otra forma de potenciar el recurso de la maqueta es que el visitante pueda interactuar con ella de la mano de la realidad aumentada.

Una variante de las maquetas convencionales es la mera reconstrucción de elementos singulares, como los que mencionábamos al comienzo de la entrada a escala real (1:1), con piezas originales que complementen la maqueta y ayuden a mejorar la comprensión y contextualización: temporal, espacial, funcional, social, etcétera, de las piezas o elementos patrimoniales expuestos. Las variantes son múltiples, pero no hay que perder el norte pensando que la maqueta es más importante que el propio contenido a exponer. Tampoco podemos añadir complejidad a la reproducción ya que entonces se perdería todo su potencial didáctico. Menos es más.

Foto principal y para redes sociales: 1959 Aston Martin DBR1 1:1 escala Le Mans replica de Evanta Motors

Recursos: SABATÉ NAVARRO, Miguel y GORT RIERA, Roser. Museo y Comunidad. Un museo para todos. TREA Ediciones, Gijón (2012).

 

 

Tus comentarios son muy importantes para nosotros

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más desde EVE Museos + Innovación

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo